Puente a la Prevención articuló 270 programas institucionales en beneficio de más de 100 mil personas de comunidades prioritarias

  • Ministerios de Justicia y Paz, Cultura y Juventud y Seguridad Pública lideran acciones en el marco de la estrategia nacional Puente al Desarrollo.
  • Agenda Nacional de Prevención de la Violencia ha impulsado el trabajo conjunto mediante alianzas público-público, público-privadas e iniciativas municipales, comunitarias y académicas.
  • Procesos de articulación están direccionados hacia 40 distritos prioritarios en materia de seguridad ciudadana.
Imagen de una persona estudiante frente a la computadora.

La tarea ha sido titánica: reunir los esfuerzos de más de 270 programas institucionales de prevención de la violencia identificados en el 2019 para poder encaminarlos hacia una estrategia integral en la que el trabajo en equipo interinstitucional, sea el protagonista de las intervenciones comunitarias.

Esa visión fue la que dio paso al nacimiento de la Agenda Nacional de Prevención de la Violencia y Promoción Social de la Paz Social 2019-2022, Alianzas para la Paz, un instrumento que pretende la coproducción de procesos preventivos, que a la fecha ha impactado la vida de más de 100.000 personas beneficiarias de comunidades en alta condición de vulnerabilidad.

Aglutinados bajo el componente Puente a la Prevención -uno de los ejes de la Estrategia Nacional Puente al Desarrollo-, los ministerios de Justicia y Paz, Cultura y Juventud y Seguridad Pública, han liderado la iniciativa en conjunto con otros socios estratégicos, como el Patronato Nacional de la Infancia y los ministerios de Salud, Educación Pública y del Deporte, entre otras. Esas instituciones y diferentes organizaciones brindan soporte a las distintas ofertas programáticas locales.

A sabiendas de que el país vivía momentos complejos en materia de convivencia y seguridad ciudadana, la Agenda Nacional demandó la obligatoriedad de generar esfuerzos encaminados a la prevención de la violencia y promoción de la paz social, ejecutándolos, no como esfuerzos individuales, sino colectivos, de tal forma que las instituciones evitaran la duplicidad de acciones, aprovecharan de una mejor manera los recursos y trabajasen de forma coordinada.

“Nuestra estrategia se construyó tomando en cuenta los hechos violentos de nuestro país, condiciones de vulnerabilidad de los territorios, de nuestras juventudes, menores de edad y caracterización de las personas privadas de libertad; eso nos permitió generar enfoques, factores de riesgo más importantes y la definición de los distritos prioritarios”, explicó el viceministro de Paz, Jairo Vargas Agüero.

Tres ejes. La oferta ha presentado una multiplicidad de procesos enmarcados dentro de tres ejes: cuido y autocuido, inclusión social y cultura de paz y convivencia ciudadana.

Se desarrollaron así procesos relacionados a formación en liderazgo, plan de vida positivo, reincorporación y retención en el sistema educativo, masculinidades positivas, prevención del suicidio, resolución alterna de conflictos, habilidades empleadoras, inteligencia emocional, hábitos saludables, organización y participación comunitaria, ciberseguridad, generación de oportunidades, acompañamiento a maternidades y paternidades tempranas, entre otros. 

También se promovió la apropiación de espacios públicos seguros, inclusivos y accesibles -en 2020 se inauguró el bulevar del barrio Santa Rita, en Alajuela-, al tiempo que se promovieron alianzas como la que se estableció junto con el Instituto Mixto de Ayuda Social, que permitió referir a 450 personas de pobreza y pobreza extrema, a los diversos programas de los Centros Cívicos por la Paz, durante el primer trimestre de 2021.

Protocolos. Los CCP sirvieron como epicentro de los procesos, talleres y sesiones de trabajo, los cuales en los últimos años han generado desde 2018 al 1er semestre del 2021,  31.972 matrículas y la gestión del diseño, aprobación y ejecución de protocolos de referencia y atención preferente a la población en condición de pobreza, los cuales son:

•           Protocolo de articulación interinstitucional para el acceso preferente de jóvenes en pobreza extrema y pobreza a la oferta del Viceministerio de Juventud.

•           Protocolo de articulación interinstitucional para el acceso preferente de personas en pobreza extrema y pobreza al Sistema Nacional de Bibliotecas (SINABI).

•           Protocolo de Articulación Interinstitucional para el acceso preferente de personas en pobreza extrema y pobreza, al Programa Centros Cívicos Por la Paz.

•           Protocolo de articulación interinstitucional para el acceso preferente de personas en pobreza extrema y pobreza, al Sistema Nacional de Educación Musical (SINEM).

•           Protocolo de articulación CCP-DGAS para la referencia de personas menores de edad y jóvenes familiares de personas privadas de libertad del Nivel Institucional del Sistema Penitenciario Nacional a los Centros Cívicos por la Paz.

Arte, recreación y deporte como herramienta de prevención. Estas actividades han tenido un espacio prioritario como poderosa herramienta de prevención. El programa “Canción por la paz” por ejemplo, ha convocado a decenas de jóvenes en sus ocho ediciones.

Además de generar espacios de expresión y recreación, los muchachos y muchachas han construido producciones relativas a la resiliencia, a la necesidad de extremar el cuido durante la pandemia y a promover una cultura de paz en los hogares costarricenses.

Tras agradecer la participación de las distintas instituciones, Sylvie Durán, ministra de Cultura y Juventud, expresó que “ampliar los espacios de participación para las juventudes, las oportunidades de desarrollo en la temprana infancia y los recursos que, desde el arte y la creatividad, fortalecen la resiliencia, la cultura de paz y la prevención de la violencia, son prioridad para este Gobierno”.

“Acciones de trabajo interinstitucional como ‘Puente a la Prevención’ vienen a dar un mayor sentido y coherencia a los esfuerzos gubernamentales de prevención de violencia, con los que se impacta, día a día, a población en condición de vulnerabilidad”, afirmó la jerarca.

Por su parte, viceministro de Seguridad Pública, Carlos Torres, afirmó que: “la estrategia Puente al desarrollo en su componente "Prevención", ha venido a fortalecer los procesos articulados, permitiendo identificar, priorizar y focalizar los riesgos sociales, delitos y otros factores generadores de inseguridad, lo cual permite la unión de capacidades policiales, culturales y de otras instituciones con el fin de emprender acciones en la gestión operativa, preventiva y participación ciudadana, generando factores de protección y mayor acercamiento con las comunidades".

 

Aliados. Para el cumplimiento de la propuesta de Puente a la Prevención resultó fundamental sumar aliados como UNICEF, PNUD, PANIAMOR, la Embajada de los Estados Unidos de América, Fundación Glaswing, RET, Fundación Saprissa, la Agencia Andaluza de Cooperación Internacional, Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura, We could be music+La escalera ilustrada Librería+Vibras TMC, Junior Achievement, Pozuelo, Upgrade Comunicación y Entretenimiento, Foro 66 TV Studio, Federación Universal para la Paz, IECSA, Súper Salón, La Minita, Living Launge, IMAX, y FundaTEC.

También brindaron sus aportes instituciones como el Instituto Nacional de Seguros, Bomberos de Costa Rica y Comisión Nacional de Asuntos Indígenas, y las municipalidades de Desamparados, Heredia, Cartago, Santa Cruz, San Carlos, Garabito, Pococí, Alajuela, Pérez Zeledón, Corredores, Puntarenas, Limón, San José, Goicoechea, Liberia, entre muchas otras.

Finalmente, bajo el liderazgo del IMAS, se implementó la Estrategia Territorial para la Prevención de la Violencia en Puntarenas (ETPVP), la cual arrojó importantes resultados en materia de prevención social de la violencia y recuperación de la convivencia pacífica tras seis meses de arduo trabajo.