“Tomé la decisión de continuar, pese al gran sacrifio de no ver a mis hijos”

 

  • En setiembre iniciaron la capacitación en el Centro Nacional Especializado en Agricultura Orgánica en Cartago.
  • Viveros de plantas medicinales, huertos agroecológicos, producción y rescate de semillas criollas, son algunos de los proyectos ejecutados por las participantes.
  • Inversión social por parte del IMAS para este grupo es de ¢8 millones.

Uno de los requisitos del programa, es la estadía permanente de lunes a viernes de las participantes en el centro; ellas no cuentan con las condiciones y los recursos económicos para viajar todos los fines de semana a visitar a sus familias.

 

Un grupo de 12 mujeres, 5 provenientes del territorio indígena Chirripó y 7 del Área Regional Chorotega, iniciaron el programa de “Mujeres Semilla Gestoras de Vida”, del IMAS, INAMU e INA, cuyo objetivo es generar el desarrollo de capacidades y habilidades para la implementación de prácticas agroecológicas en los lugares de origen de las participantes.

Luego de tres meses de recibir clases teóricas y prácticas en el Centro Nacional Especializado en Agricultura Orgánica, ubicado en La Chinchilla de San Rafael de Oreamuno en Cartago y convivir en casas aledañas al Centro, estas mujeres contarán con las herramientas para el desarrollo de proyectos productivos amigables con el ambiente.

Un ejemplo es el caso de Maday Céspedes Morales, proveniente de la comunidad Ñari Ñack del territorio indígena Cabécar de Grano de Oro de Chirripó de Turrialba. Ella culminó con éxito el programa y actualmente cursa el técnico en agricultura orgánica.

Uno de los requisitos del programa, es la estadía permanente de lunes a viernes de las participantes en el centro; ellas no cuentan con las condiciones y los recursos económicos para viajar todos los fines de semana a visitar a sus familias.

Maday visita a sus hijos de 8, 6 y 2 años cada mes en la casa de sus padres, lugar donde debió trasladarnos para el cuido y cercanía, ya que su casa se ubica a 4 horas caminando desde la parada del bus, cruzando el Río Chirripó en cable.

“Yo terminé el colegio y me salió esta oportunidad, la cual decidí aprovechar al máximo, la experiencia ha sido maravillosa y los conocimientos adquiridos de gran provecho. Tomé la decisión de continuar con el técnico consciente de que no iba a ser fácil, pero como mujer y madre me quiero superar, pese al gran sacrificio de no ver a mis hijos” manifestó Maday. 

“Mujeres Semillas Gestoras de Vida” es un proyecto interinstitucional (IMAS-INA-INAMU), dirigido a mujeres especialmente de zonas rurales e indígenas, quienes recibirán los títulos de Abonos Orgánicos, Producción de Cultivos Orgánicos, Cultivo Hierbas Aromáticas y Medicinales, Agricultura Orgánica y Formulación y Evaluación de Proyectos Agropecuarios, al culminar el proceso. Además, reciben el título de “Fortalecimiento personal y colectivo del Programa Avanzamos Mujeres” del INAMU.

El IMAS les otorga a estas mujeres un subsidio de ¢400 mil colones para cubrir sus gastos personales, hospedaje, transporte, alimentación y aporte al hogar durante el trimestre en que realizan la capacitación y se encuentran lejos de sus familias.

Al finalizar, cada egresada puede presentar un proyecto al IMAS, para el otorgamiento de un subsidio a través de una Idea Productiva, para el financiamiento de materiales e insumos requeridos para consolidar los proyectos agroecoproductivos en las comunidades. Maday ya se encuentra trabajado en su proyecto de construcción de un invernadero para transferir lo aprendido en su comunidad y enseñarles a los niños, jóvenes y personas adultas mayores.

Estas nuevas estudiantes se suman a 17 mujeres más que se graduaron del programa en junio del 2018.